Rolando era de Colonia, estaba casado, tenía un hijo de un año y medio y una pequeña hija de 1 mes, era obrero textil de Campomar y militante frenteamplista. Después del golpe de Estado de 1973 fue despedido junto a decenas de obreros de la fábrica Campomar por su activa participación sindical resistiendo a la dictadura.
Emigró a Argentina donde fue asesinado por personal policial de la comisaría de Villa Ballester (Buenos Aires), en setiembre de 1975, junto a Luis Alfredo Guerrero.
El sindicato de la fábrica texti del Juan Lacaze (Colonia), rindió homenaje a los trabajadores destituidos que enfrentaron el golpe de Estado en 1973. La familia conserva un documento de este reconocimiento.