El libro La CIA por dentro de Philip Agee, se publicó originalmente en 1975 bajo el título en inglés Inside the Company: CIA Diary.
Philip Agee relata en él su carrera como oficial de operaciones encubiertas de la CIA, durante doce años, desde mediados de la década de 1950 hasta principios de 1969. En esos años, en el contexto de la guerra fría, trabajó en varios países, principalmente en América Latina. Agee narra, en primera persona, sus experiencias en la CIA, describiendo las estructuras internas, los métodos de reclutamiento, las estrategias de infiltración y manipulación política, así como las campañas de desinformación y operaciones encubiertas contra gobiernos y movimientos considerados contrarios a los intereses estadounidenses.
En particular, el libro describe cómo Uruguay tuvo un papel importante en las redes de intercambio de información y entrenamiento anticomunista regional. Agee señala que oficiales uruguayos recibían instrucción y apoyo técnico de la CIA, y que el país participaba en el intercambio de inteligencia con otros Estados sudamericanos bajo coordinación estadounidense. También menciona que diplomáticos y agentes operaban desde Montevideo como parte de un entramado de cobertura para actividades de espionaje y seguimiento de opositores políticos
La obra combina memorias personales con un análisis político, revelando nombres, lugares y operaciones concretas que, según el autor, demuestran la injerencia sistemática de la CIA en asuntos internos de otros países, especialmente en América Latina. Además, documenta la coordinación con servicios de inteligencia locales, la manipulación de medios de comunicación, el financiamiento de grupos afines y el uso de tácticas de contrainsurgencia y represión.
Entre fines de los años 70 y principios de los 80 Agee fue expulsado de varios países europeos (Reino Unido, Francia, Países Bajos, Alemania Occidental) bajo presión estadounidense. En 1979, el Departamento de Estado de EE.UU. le revocó el pasaporte.
Murió el 7 de enero de 2008 en La Habana, Cuba, a los 72 años