El represor que se desempeñaba en el Batallón de Infantería Nº 10 de Treinta y Tres fue procesado el 20 de junio de 2022 por asesinato bajo torturas del del albañil y militante del Partido Demócrata Cristiano Luis Batalla, ocurrido en mayo de 1972. En julio de 2025 la justicia lo condenó por ese crimen.
En octubre de 2022 fue procesado por torturas a 39 jovenes, en su mayoría estudiantes de secundaria de entre 13 y 17 años de edad, en un operativo dirigido por el Batallón de Infantería N° 10 de Treinta y Tres en abril de 1975. Recibió condena por esos crímenes en setiembre de 2024.