A Floreal lo conocían como "el negrito", era un adolescente estudiante de secundaria. Vivía con sus padres en la ciudad de Munro (Buenos Aires)
La madrugada del 15 de abril de 1976 el adolescente fue secuestrado por un grupo de tareas junto a su madre por represores argentinos y llevado al Centro Clandestino de Detención y Tortura de Campo de Mayo. Allí fue torturado y luego arrojado a aguas del Río de la Plata como parte de los operativos de exterminio conocido como vuelos de la muerte.
Sus restos aparecieron a varias millas de Montevideo en mayo de ese año, atado de pies y manos junto a otros siete cadáveres. La dictadura uruguaya realizó declaraciones de prensa con la versión de que los restos humanos hallados correspondían a tripulantes muertos en alta mar, a causa de una pelea en un pesquero coreano. Fueron inhumados en el Cementerio del Norte en la Fosa: Tubular 5290. Servicio Fúnebre Municipal 6 como NN, desapareciendo sus cuerpos.