Mirtha estaba casada con Floreal, ambos tenían un pequeño hijo y eran militantes del Movimiento de Liberación Nacional - Tupamaros (MLN-T).
Floreal estuvo preso en 1971 y durante un año en el marco de las Medidas Prontas de Seguridad, al ser liberado es obligado a dejar el país y se va a Chile con su familia.
Luego del golpe de Estado contra Allende Floreal y Yolanda viajan a Argentina y se radican en la provincia de Buenos Aires.
La familia participaba de un cumpleaños cuando los secuestran un grupo de civil fuertemente armado a plena luz del día, el 8 de noviembre de 1974. Es una acción que se organizó en el marco de la coordinación represiva conocida como Plan Cóndor.
Todo el grupo fue llevado a un lugar desconocido mencionado como el “garaje” por sobrevivientes. Posteriormente fueron trasladados clandestinamente a Uruguay, estuvieron en el centro clandestino de detención y torturas “Casa de Punta Gorda”.
El 20 de diciembre su cuerpo aparece acribillado junto a su esposo y otros tres compañeros, en un paraje próximo a la localidad de Soca (Canelones).
Su hijo Amaral tenía entonces 3 años y fue apropiado por efectivos vinculados a la Secretaría de Inteligencia de Argentina, recuperó su identidad en 1985.