Amaral fue secuestrado en Argentina junto a sus padres Floreal García y Mirtha Yolanda Hernández y un grupo de compañeros. El niño que tenía tres años de edad fue apropiado por un matrimonio vinculado a la Secretaría de Inteligencia de Defensa del Estado Argentino (SIDE - Argentina).
Sus padres fueron trasladados ilegalmente a Uruguay y fusilados en un operativo conocido como "fusilados de Soca", enmarcado en la coordinación represiva del Plan Cóndor.
A partir de varias gestiones de búsqueda es localizado en julio del año 1984 en la localidad de Formosa, Argentina y restituida su identidad en setiembre de 1985.
Pocos meses después se trasladó al Uruguay para vivir junto a sus tíos paternos.