Jorge fue secuestrado en su domicilio por miembros del Ejército argentino, en el marco de la operativa del Plan Cóndor. Se encontraba en su domicilio, junto a su esposa Marta Severo, su tía Rosa Álvarez, su cuñado Carlos Severo y su hija, de pocos días de nacida. La niña fue entregada a una vecina por los secuestradores.
Marta, Jorge y Carlos permanecen detenidos desaparecidos.