María Emilia Islas y su pequeña hija Mariana, fueron secuestradas de su casa la tarde del 27 de setiembre de 1976 por un grupo de represores uruguayos y argentinos, vestidos de civil y fuertemente armados. Jorge, su esposo, había sido secuestrado poco tiempo antes cuando se dirigía a la casa, lo obligaron a esperar la llegada de María Emilia para trasladar a toda la familia al centro clandestino de detención y torturas Automotores Orletti.
El apartamento fue totalmente saqueado. Jorge y Maria Emilia permanecen desaparecidos. Mariana Zaffaroni Islas fue apropiada por el represor Miguel Ángel Furci y recobró su identidad, años después.