Al sur de la capital departamental, se ubica el Regimiento de Caballería No. 2 más conocido como Cuartel de Durazno.
Allí funcionó un centro de detención y torturas desde 1972 en donde permanecieron secuestrados decenas o quizá cientos de mujeres hombres militantes de izquierda y de organizaciones sindicales. Los subsuelos y un aljibe se utilizaban como calabozos.
Óscar Fernández Mendieta era un trabajador rural de 26 años, militante del Partido Comunista Revolucionario, el 24 de mayo de 1973, unas semanas antes del golpe de Estado, lo detienen en su casa un grupo de militares que lo conducen al Cuartel, muere allí horas a consecuencia de las torturas recibidas.
Por allí pasaron también, en distintos períodos, los rehenes del MLN-T, parte del testimonio de Henry Engler sobre este lugar puede verse en la película "El Círculo".
Chela Fontora, trabajadora cañera y militante del Movimiento de Liberación Nacional Tupamaros cuenta los abusos a los que fue sometida. En su libro "La llama no se apaga" relató un impactante testimonio sobre el funcionamiento de las órdenes en el Regimiento:
“Una noche en Durazno formaron a toda la tropa y vino el oficial y dijo «Uno por uno va y la viola»
y yo estaba ahí y una piensa «Que me trague la tierra, que me dé un infarto, que me desmaye»,
cuantas veces una quiere desmayarse pero no puede. De repente un milico dice «Yo no la voy a
violar porque mi madre es mujer y mi hermana es mujer, yo no lo voy a hacer». Empezó ese milico
y todos después se negaron”.